domingo, 10 de mayo de 2015

Electrónica de Enzo Maqueira

Maqueira, Enzo. Electrónica. Interzona: Buenos Aires, 2014.

Formato Editorial: Linda edición; clara y sana tipografía, pero con márgenes cortos.

Bio: comunicador social nacido en Buenos Aires (1977), este es su quinto libro, entre crónicas y relatos; participó de un encuentro de jóvenes escritores de la Casa de las Américas de Cuba; en una entrevista dice que le interesa volver a la "intención política" de la narrativa del Boom.

¿Cómo llegó a la Proxemia?: préstamo de la Biblioteca Barrial "Gonzalo León" de Literatura Contemporánea.

En serie con: Los catorce cuadernos de Juan Sklar, por la temática joven.

Estructura: Novela en seis capítulos de títulos muy jóvenes ("Warm-up", "2.0", "Failed", "3.0", "4.0" y "Beta").

Desafío Lamborgh*: Un garche demasiado bueno le recuerda a una treintañera que su vida es una mierda.

Contenido/ Temas: El desencanto sobre la fiesta y la juventud. La vida de "la profesora", que a los veinte era asidua a las drogas y fiestas electrónicas, la encuentra a los treinta años de novia con un tipo mediocre, al que detesta tanto como a ella misma, insatisfecha y drogándose considerablemente menos que antes. Se encama con un alumno de dieciocho años que, unas semanas después, la rechaza; y empieza a desbarrancarse.
El narrador es sumamente crítico con su personaje. Pero la profesora lamentablemente no es más que un estereotipo ("La hija típica de la clase media de los noventa. Ese subtipo snob que vivía su pasado menemista con culpa"), con lo cual las críticas y apreciaciones tendenciosas caen en el saco roto de la generalidad: no hay personaje, estrictamente, ni singularidad de carácter, sino una idea bastante extendida sobre cierto grupo de la juventud porteña al que –de la manera en que está planteado en el texto– el lector difícilmente podría apreciar. Apuntalado con un bagaje considerable de canciones, marcas, temas de conversación y películas que pertenecerían a la generación de la profesora, la novela se construye a partir del lugar común y se afirma en la convicción de que, desde el lugar común, se puede desarrollar una mirada crítica o una reflexión: "Un lugar común, pero a la larga se terminaba dando cuenta de que los lugares comunes dicen la verdad". Sin embargo, esa verdad que alcanza la novela termina siendo otro lugar común (No hay que buscar la felicidad ni en el amor ni en la juventud) que, por su lugar evidenciado en el último párrafo, se hace aún menos sostenible.

Estilo: La elección de un narrador en segunda persona resulta particular al principio, ya que da la sensación de que es una conciencia hipermoralista la que machaca y machaca la cabeza de la profesora. Con las páginas, esa voz cansa y aburre (sin mencionar los obstáculos constantes que pone a la fluidez de la prosa, con la obligada y cacofónica repetición de verbos en segunda –"fuiste", "viniste", "dijiste"–, o cómo se enreda con saltos inexplicables de vuelta a la clásica y fiel tercera persona). Pero lo menos atinado de este procedimiento aparece al final, cuando la voz narradora se revela como la de un personaje intradiegético ¡¡que le está leyendo ese mismo texto a la protagonista en el Pacha!! Ese giro abrupto hacia el presente del relato –además de inverosímil dada la extensión de la novela– es efectista por el golpe dramático que intenta dar al cierre de la novela.

Punch: Al principio sí: la narración tiene mucha velocidad, sucesión acelerada de imágenes en los recuerdos y pensamientos de la protagonista; pero con las páginas la nafta se acaba exponencialmente.

Nos preguntamos: ¿Garpa, hoy, un narrador moralista?

Nos respondemos: Tal vez sí, pero si su bajada de línea nos muestra algo (una voz, una mirada) que no conocíamos.

Anclaje Socio- histórico: Hoy; en un entre-nos ceñido.

Estado de la materia: Sólido.

Digestión: Rápida.

¿Para leer en vos alta?: Sólo para comprobar las repeticiones de palabra.


*Según dicen, Osvaldo Lamborghini solía jugar un juego que consideramos muy productivo para el ejercicio lector: resumir la trama de una novela en una oración (ej. comúnmente citado: "Un estudiante mata a una vieja para probar que es Napoleón" –Crimen y castigo)